– Cuando iniciamos una actividad sexual, antes de nada se genera en nosotros un deseo, es decir, las ganas de experimentar o disfrutar del sexo, la búsqueda del contacto sexual o placer, la atracción por el material erótico, etc. Es aquí donde nos imaginamos e iniciamos nuestras fantasías sexuales. Teniendo lugar la eclosión psico-fisiológica de la respuesta sexual-
Aunque parezca que no, en esta fase pueden aparecer diferentes problemas sexuales tanto en el hombre como en la mujer, los cuales son la aversión al sexo y el deseo sexual hipoactivo o Falta de deseo sexual entre otros.
– Una vez dado el primer paso, pasaríamos al segundo que se correspondería con la fase de excitación en la cual, se inicia en nosotros una serie de cambios fisiológicos producto de la estimulación sexual-
A la cual podemos llegar de cualquier forma, hasta donde pueda alcanzar nuestra imaginación.
Es esta fase donde la mujer comienza a lubricar vaginalmente, el clítoris y los pechos aumentan de tamaño. Teniendo lugar en el hombre la erección del pene. Es en esté punto donde se inicia la respuesta sexual fisiológica.
Las disfunciones sexuales más conocidas que pueden aparecer en esta fase son la disfunción eréctil en el hombre y problemas en la excitación en la mujer.
– El tercer paso correspondería a la fase del orgasmo donde todos queremos llegar sin que nada pueda estropear dicho momento. Esto es así, porque tienen lugar los cambios fisiológicos más importantes relacionados con el placer–
En el hombre se produce la contracción de la uretra y el pene (eyaculación) y en la mujer la contracción del tercio externo de la vagina y del esfínter anal. El clítoris permanece retraído y oculto.
Y como no puede ser de otra manera también puede aparecer ciertas disfunciones sexuales como anorgasmía en la mujer y la eyaculación precoz en el hombre.
– Poniendo punto y final, a la parte más fisiológico de la respuesta sexual nos situaremos en la fase de resolución en la cual tiene lugar la pérdida progresiva de la tensión sexual y la vuelta gradual del organismo a su estado normal. El hombre entraría en un proceso conocido como período refractario en el cual será muy difícil pero no imposible que pueda conseguir otra erección o llegar al orgasmo, siendo recomendable si se quiere iniciar otra vez la actividad sexual esperar un tiempo determinado-
En la mujer no se da dicho proceso, pudiendo disfrutar o experimentar múltiples orgasmos de forma repetida en un corto periodo de tiempo.
Lamentándolo mucho hemos llegado a la última fase la cual es la más importante y hace referencia al componente subjetivo.
En ella donde valoramos personalmente si ha sido satisfactoria o no, la actividad sexual, lo que nos lleva a decidir cómo, cuándo, con quién, y doónde tendrá lugar nuestra próxima actividad sexual.