No sé qué hacer.

Miro el whatsapp para ver si estas conectada.

Miro el Facebook para ver si has quitado nuestras fotos.

No entiendo nada.

Necesito escuchar tu voz, verte sonreír, poder preguntarte ¿cómo estás?.

Algo habrá que pueda hacer.

Te escribo, te llamo, o mejor espero a que me escribas.

No sé cual es la mejor opción.

Estaré soñando.

Quiero despertarme de esta pesadilla, saber que estás a mi lado y todo sigue igual.

Necesito respirar, necesito volver a ser yo.

No hay día que no me levante, pensado en ti.

No quiero ser uno más.

Tengo miedo de encontrarte y tener que darte dos besos.

Lloro, grito a escondidas.

Busco en el pasado, las respuestas del presente.

Seguro que tiene solución.

Me cuesta aceptar y poder contar la verdad.

Me preguntan y no sé qué decir.

Me merezco una segundad oportunidad.

Puedo cambiar. Sólo necesito tiempo.

¡Un clavo saca a otro clavo!. No es verdad.

Ni quiero, ni puedo olvidarte.

Te estarás acordando de mí como yo me acuerdo de ti.

¿Cómo será volverte a ver?

Los planes, las promesas no pueden estar formando parte del pasado.

Nuestro tiempo aún no se ha acabado.

Aunque no estés a mi lado, te siento cerca de mí.

Pregunto por ti, sin obtener respuesta.

Me miro al espejo y no me reconozco.

Todo lo que me rodea, me recuerda a ti.

Me enseñaste a creer en algo que tenía olvidado.

Fuiste sincera sin tener que serlo.

Me hiciste ver, lo que yo pensaba que era imposible.

Todo lo que empieza alguna vez tiene que acabar.

Te pido perdón, por haberte fallado.

Si solo pudiera elegir, una palabra entre un millón.

Gracias.

Dicen que el tiempo todo lo cura, pero nunca olvidaré lo que hemos vivido juntos.

Podré aceptar algún día lo que no quise entender.