Situación Nº 1: Ismael.

En mi caso, me vi obligado a migrar.

Ahora lo puedo contar pero en su momento se me hizo muy difícil.

Llegas con ilusión y ganas de comerte el mundo, pero desde el minuto uno te das cuenta que la realidad es otra.

Los trabajos a los que puedes optar son los que nadie quiere, pero te ves obligado a cogerlos, más que nada porque tienes que pagar un alquiler y comer.

Pasas de vivir con tu familia a convivir con 6 ó 7 personas que desconoces en un mismo piso.

Como no dominas el idioma, cualquier tipo de trámite o problema se convierte en una odisea.

Los días que libras, o te vas solo a los sitios o te quedas en tu habitación.

No puedes comportarte como realmente eres porque nadie te entiende.

Las pequeñas cosas que nunca te hubieras imaginado que te iban afectar, al final te afectan (el clima, los horarios, la comida, etc).

Cuando hablas con tu familia no les puedes decir como estás para no preocuparles.

La mayor parte del tiempo tienes ganas de llorar, estás en continúa tensión y nerviosismo, pierdes el interés por querer avanzar porque no te ves con las capacidades para lograrlo, tienes tal nivel de ansiedad que no puedes dormir, concentrarte y los problemas gastrointestinales son diarios, te desesperas, frustras, y así todos los días.

Situación Nº 2: Irene.

En mi caso tuve que volver a casa de mis padres tras estar 6 años independizada, desde los 27 hasta los 33 años. Además se me juntó con que tenía que buscar trabajo.

Ahora me lamento pero en su momento no me di cuenta.

La vuelta me la tomé como un fracaso.

Estaba la mayor parte del tiempo irascible, irritada, a la mínima saltaba, todo me molestaba.

Engordé más de 10 kilos porque lo único que me calmaba los nervios era comer.

Perdí la iniciativa, me volví insegura y la confianza en mi misma.

Cuando realmente lo tenía todo. ¿Dónde iba a estar mejor?

A pesar de ello, no paraba de darle vueltas al por qué había llegado a está situación.

Apenas dormía.

Me faltaba el aire, estaba en continúa tensión, con unos dolores de cabeza horrorosos…

Al no tener intimidad, apenas tenía relaciones sexuales y para tenerlas tuve que volver a utilizar el coche…una odisea.

A pesar de que entraba y salía cuando me daba la gana, me sentía agobiada, acorralada, dudaba en cualquiera de mis decisiones.

Incluso dejé mis clases de teatro y de salir con mis amigos/as porque me daba vergüenza tener que contar que había vuelto a casa de mis padres.

Situación Nº 3: Marcos.

 En mi caso lo dejé todo por una persona y al final acabó dejándome al año y medio.

Mi ex pareja, tras terminar la carrera de derecho, se fue a hacer un Máster a Dinamarca. A los pocos meses de terminar el Máster le ofrecieron un puesto de trabajo.

Como yo ya tenía mi trabajo en España, durante más o menos un año, estuvimos yendo y viniendo para poder vernos

Cuando llegó el momento, fui yo el que me arriesgué y tomé la decisión de irme con ella.

Una vez allí, los primeros meses iba todo bien, aunque la veía diferente, ya no era misma. No me digáis porqué.

A pesar de ello, me puse a buscar trabajo como camarero, ya que por mi nivel de inglés, no había manera de poder acceder a otro puesto de trabajo.

Solo la tenía a ella. Así que o estaba con ella o solo.

Los meses fueron pasando, y la convivencia cada vez se hacía más difícil.

Comencé a pasar más tiempo solo porque ella, entre el trabajo y que tomó la decisión de salir sola con su grupo de amigos/as, decía que necesitaba su espacio.

Al año y medio, como he dicho antes, me dijo que lo mejor era dejarlo.

Imaginaros, de un día para otro me vi en un país desconocido, con un trabajo que no tenía nada que ver con mi formación y sólo.

Mi primera decisión fue volver a España pero me dio vergüenza.

Entonces decidí quedarme.

Pase de estar normal a un estado de nerviosismo, miedo, ansiedad, tensión muscular, irritabilidad, nauseas, diarreas, me sentía cansado, adelgacé más de 10 kilos, no paraba de pensar en ella, en llamarla, apenas dormía 4h, no podía hablar con nadie, ni tampoco salir porque no tenía dinero, no podía concentrarme lo que me llevó a perder varios trabajos…

Un horror. No se lo recomiendo a nadie.

¿Qué es un Trastorno Adaptativo?

  • Es una reacción de desajuste o inadaptación, ante uno o más acontecimientos estresantes.
  • El estresor puede ser cualquier evento psicosocial y sus características pueden variar: ser único o múltiple, recurrente o continuo, leve o severo, común o extraordinario.
  • Los problemas psicológicos han de causar un impacto importante en la persona, provocando una notable interferencia y deterioro (social, familiar, relacional, laboral o académico) en su vida, junto con un gran malestar y sufrimiento personal.
  • Tienen una alta prevalencia, en cualquier franja de edad.

Síntomas más característicos del trastorno Adaptativo

  • Los problemas psicológicos han de causar un impacto importante en la persona, provocando una notable interferencia y deterioro (social, familiar, relacional, laboral o académico) en su vida, junto con un gran malestar y sufrimiento personal.
  • Los estresores que pueden provocar el trastorno adaptativo son muy variados. Los más frecuentes son los relativos al grupo primario de apoyo (problemas familiares, de pareja, etc.), problemas sociales y relacionales (con amigos, de vecindad, etc.), problemas laborales (desempleo, trabajo estresante, etc.), relacionados con la enseñanza (fracasos escolares, con el profesor, con compañeros de clases, etc.), económicos, enfermedad crónica, familiar dependiente, etc.
  • Es muy difícil predecir qué estresor provocará un Trastornos Adaptativo y puede que un acontecimiento aparentemente inocuo provoque el trastorno, mientras que otros intensamente traumáticos no impacten al individuo de modo significativo. Dependerá del estresor y la persona.
  • Las manifestaciones sintomáticas son muy variadas: Apatía, anhedonía, miedo, rabia, impulsividad, ansiedad, preocupación, sentimientos de incapacidad para afrontar los problemas de planificar el futuro o de poder continuar con la situación presente, etc. La reacción predominante puede ser una reacción depresiva (breve o prolongada), o una alteración de otras emociones (ansiedad, ira,…) y de la conducta (alteraciones disóciales).
  • En cuanto al curso, estos trastornos suelen tener un inicio rápido y no prolongarse excesivamente en el tiempo. Cuando hay complicaciones suelen ser con Depresión Mayor y abuso de sustancias (fundamentalmente, alcoholismo).

 

Tipos de Trastornos Adaptativo

  • Trastorno adaptativo con ansiedad. Las manifestaciones predominantes son síntomas como nerviosismo, preocupación o inquietud inseguridad, palpitaciones, problemas para dormir, rumiación, miedo entre otros.
  • Trastorno adaptativo Mixto con ansiedad y estado de ánimo depresivo. Los síntomas predominantes relacionados con la ansiedad y depresión.
  • Trastorno adaptativo con trastorno de comportamiento. La manifestación predominante es una alteración del comportamiento, en la que hay una violación de los derechos de los demás o de las normas y reglas sociales apropiadas a la edad. Como por ejemplo: conducción irresponsable, peleas e incumplimiento de las responsabilidades legales).
  • Trastorno adaptativo con alteración mixta de las emociones y el comportamiento. Las manifestaciones predominantes son tanto síntomas emocionales (depresión y ansiedad) como trastorno de comportamiento.

La duración de los síntomas de un trastorno adaptativos puede indicarse mediante la elección de una de las siguientes especificaciones:

  • Agudo. Esta especificación puede utilizarse para indicar la persistencia de síntomas durante menos de 6 meses.
  • Crónico. Esta especificación puede utilizarse para indicar la persistencia de síntomas durante 6 meses o más. Por definición, los síntomas no pueden persistir durante más de 6 meses después de la desaparición del estresante o de sus consecuencias. La especificación crónica se aplica cuando la duración de la alteración es superior a 6 meses en respuesta a un estresante crónico o a un estresante con consecuencias permanentes.
BORJA CUELLAR

BORJA CUELLAR

Psicológo Sanitario

Desde que cursé el Máster Oficial de Psicología Clínica y de la Salud, he ido compaginando la intervención psicológica con el diseño y desarrollo de proyectos sociales. Mientras tanto he ido complementando mi formación con distintos cursos del Colegio Oficial de psicólogos y otras instituciones.

Decidí crear el «Blog Qué Piensa un Psicólogo » para ayudar, dar a conocer de una forma creativa y diferente los entresijos de la ciencia que estudia el comportamiento humano (psicología), y como medio de aprendizaje continuo personal y profesional.