¿Cuándo te diste cuenta de que tenías un problema?
Al principio no fui consciente, como es algo que utilizamos todos para todo, no notas nada, lo ves como algo normal.
Con el paso del tiempo, lo que comenzó siendo un medio para comunicarme, se convirtió en un grave problema. Perdí el control, lo utilizaba para todo y cuando digo todo es todo.
Daba igual el día de la semana, con quién o qué hiciese, me pasaba la mayor parte del tiempo mirando el teléfono móvil.
No podía separarme de él. Sólo pensar que lo podía perder, romper, olvidar o quedarme sin batería, cobertura o datos, me aterrorizaba. Pasé de tener un móvil a llevar dos, además de una batería de repuesto incorporada en el móvil, y otra batería extra por sí no podía recargarlo… vivía por y para el teléfono móvil.
Si ves que me enrollo tu dímelo no te cortes.
Me di cuenta, cuando mi novia me dio un ultimátum.
En ese momento, vi pasar mi vida por delante de mis ojos y no podía perder esta oportunidad, porque si no lo iba a perder todo.
A toro pasado todo parece fácil…pero no lo fue.
¿Con qué frecuencia mirabas el teléfono móvil al día?
No sé, nunca lo llegué a contar pero seguramente, al día, lo podía llegar a mirar o desbloquear unas 200 veces.
¿Cuántas horas podías pasar utilizando el teléfono móvil?
Dependiendo el día pero fácilmente unas 4 ó 5 horas.
¿Par qué utilizabas el teléfono móvil?
Pufff, para todo. Estaba continuamente conectado a Facebook, Instagram, Twitter, Linkedin, me pasaba horas viendo videos de YouTube o jugando a juegos online como por ejemplo el Candy Crush o juegos de estrategia. Llegué a tener más de 50 aplicaciones.
¿Dónde lo solías utilizar?
En cualquier sitio que te puedas llegar a imaginar; en el trabajo, si quedaba con mis amigos/as, en reuniones familiares, en el metro o autobús, en el baño, en la cama, en el cine, en el gimnasio, en el teatro, de vacaciones, cocinando, comiendo, cenando, montando en bici, corriendo, conduciendo, incluso manteniendo relaciones sexuales.
¿Qué problemas te llegaron a causar dicha dependencia al teléfono móvil?
En mi caso, fui perdiendo poco a poco el interés por las personas que me rodeaban pero sobre todo de mi pareja. Hablaba menos con ella, no buscaba momentos de intimidad, me olvidé por completo de la relación.
Dejé de hacer deporte, lo que me llevó a engordar más de 10 kilos. Me despreocupé totalmente de mi aspecto físico. ¡Con lo que era yo!.
No era capaz de atender o disfrutar de aquello que estaba haciendo. Ahora entiendo por qué, mis amigos/as, mis padres y mi pareja, me decían que para hacer acto de presencia mejor que no estuviera con ellos/as.
Mi rendimiento laboral bajó, hasta el punto de casi ser despedido.
En varias ocasiones casi me atropellan y estuve apunto de tener algún que otro accidente de tráfico.
No dormía lo suficiente, estaba cansado, apático, irritado.
Lo peor de todo, era la necesidad que tenía de utilizar el teléfono móvil. Cada día que pasaba era más y más, y sino lo hacía me sentía mal, inútil, débil, inseguro, incapaz de afrontar cualquier tipo de situación.
Estaba obsesionado.
Señales de alarma para prevenir la dependencia al teléfono móvil
- Privación del sueño.
- Desinterés o descuido de otras actividades importantes, como el contacto con la familia, la pareja, las relaciones sociales, etc.
- Recibir quejas en relación al abuso del teléfono móvil.
- Pensar en el teléfono móvil constantemente, incluso cuando no se está conectado, lo has olvidado o perdido, sentirse irritado excesivamente cuando la conexión falla o resulta muy lenta.
- Mentir sobre el tiempo real que se está utilizando el teléfono móvil.
- Aislarse socialmente, mostrarse irritable y bajar el rendimiento académico o laboral.
- Sentirse irascible incluso agresivo si no se puede utilizar el teléfono móvil.
- Estar permanentemente atento al teléfono móvil.
- Uso excesivo asociado a una pérdida de control, ante la imposibilidad temporal de acceder al teléfono móvil o la necesidad creciente de aumentar el tiempo de utilizar el teléfono móvil.
Síntomas característicos de la Dependencia al teléfono móvil
La manifestación característica de la dependencia es el deseo por utilizar o consumir dicha sustancia u objeto.
Dos tipos de dependencia: física y psicológica.
- Física: los dos aspectos principales son la tolerancia y el síndrome de abstinencia.
- Psicológica: situación en la que existe un sentimiento de satisfacción y un impulso psíquico que exige el uso continuado del teléfono móvil para producir placer o evitar el malestar. La persona orienta toda su vida a estar pendiente de la misma, llegando a abandonar otras actividades.
Uso, Abuso, y Conducta Adictiva
Abuso: comportamiento continuado a pesar, de sus consecuencias negativas.
Conducta adictiva: La persona pierde el control cuando desarrolla una actividad determinada y que continúa con ella a pesar de las consecuencias negativas de todo tipo, así como que adquiere una dependencia cada vez mayor de esa conducta.
Dicho comportamiento está desencadenado por un deseo intenso hasta una auténtica obsesión y es capaz de generar un síndrome de abstinencia si se deja de practicarlo.
Las personas dependientes al teléfono móvil experimentan un síndrome de abstinencia, cuando no puede dar un uso del mismo, caracterizado por la presencia de un profundo malestar emocional (estado de ánimo disfórico, insomnio, irritabilidad e inquietud psicomotriz).
B.C.R
Psicológo Sanitario
Desde que cursé el Máster Oficial de Psicología Clínica y de la Salud, he ido compaginando la intervención psicológica con el diseño y desarrollo de proyectos sociales. Mientras tanto he ido complementando mi formación con distintos cursos del Colegio Oficial de psicólogos y otras instituciones.
Decidí crear el «Blog Qué Piensa un Psicólogo » para ayudar, dar a conocer de una forma creativa y diferente los entresijos de la ciencia que estudia el comportamiento humano (psicología), y como medio de aprendizaje continuo personal y profesional.